miércoles, 7 de agosto de 2013

Segundo



Nicotina y alquitrán para paliar el paso lento de las catatónicas agujas de mi reloj, tan blanco como tu culo y apago el cigarrillo; en el rocío residual y qué más da; si tú no estás ni cuando estás. 
Vivo ligada al olor, un olor. El olor de tu habitación un tórrido sábado de verano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario